Resumen
El M19, una antigua guerrilla en Colombia conocida por actos vandálicos como el robo de la espada de Bolívar, terminó con la violenta toma del Palacio en 1985. Décadas después, elementos asociados a este grupo llegaron al poder, generando críticas sobre su capacidad para gobernar.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Como dicen en la Costa Atlántica de Colombia, los “mansitos” del M19, eran unos guerrilleros con igual perfil que como cualesquiera criminales pueden compararse, teniendo ahora en el poder a funcionarios ineptos, bandidos y de mínima formación técnica e intelectual, para mandar y gobernar bien un país. Un hecho de gran vandalaje fue robar la espada del Libertador Simón Bolívar, acaecido un 17 de enero de 1974, hace más de cincuenta años, de una casa museo de Bogotá, cuando los celadores todavía dormían el guayabo de las fiestas de cierre e inicio de año. Nuestro “querido” presidente de entonces era el Dr. Misael Pastrana Borrero, que, al decir de los guerrilleros, le hurtó las elecciones a mi general Gustavo Rojas Pinilla, con ayuda de liberales y conservadores, porque, mi general era de la Anapo.
Pasan los tiempos, y un 27 de febrero de 1980, hace más de 44 años, se toman la embajada de la República Dominicana, en Bogotá, siendo el “querido” presidente de los colombianos, el Dr. Julio Cesar Turbay Ayala, que “evidentemente”, por respeto a la diplomacia, negoció, de tal manera que no hubiesen lastimados, lo que nuevamente, “evidentemente” ocurrió”.
Llega el 6 de noviembre de 1985 y la misma “chusma” del M19, se toma la Corte Suprema de Justicia, con los desenlaces que ya conocemos; esto hace 39 años, siendo presidente de la nación, el “querido” Dr. Belisario Betancur Cuartas, cuyo hijo era de izquierda. Aquí tenemos que analizar varios fenómenos: No se asaltaba una embajada, en donde la diplomacia tomaba cartas, dada la condición de internacional. Por lo tanto, se podía proceder “con acción de guerra”.
Los del M19, seguramente pensaron que iban a negociar igual que con Turbay y “tacaron burro”. De los señores militares, se dice, que sabían que este echo podía ocurrir y era el momento preciso para darles el golpe contundente “con acción de guerra”. De la presidencia de la República hay que mirar hechos históricos en donde la corte y el ejecutivo no se llevaban de buenas pulgas, dada que la corte casi siempre le tumbaba a Belisario, los decretos ley, por anticonstitucionales, como por ejemplo los de la emergencia económica, que Betancur recordaba cómo se los aceptaban con beneplácito al Dr. Alfonso López Michelsen, “querido” presidente del periodo anterior. Por eso recordemos las llamadas de clamor que hacía el Dr. Alfonso Reyes Echandía, presidente de la Corte Suprema de Justicia, pidiéndole al presidente que le dijera al ejercito que cesara la acción bélica y este señor presidente quedó sordo.
Otros dicen que los militares le dieron un “golpe de estado transitorio”, para poder erradicar lo más “selecto de los guerrilleros” y siguieron “con acción de guerra”. El Dr. Belisario Betancur, unos meses antes de su muerte, dijo que había escrito un libro sobre la toma del Palacio de Justicia y que sería publicado cuando ya hubiera hecho las paces con el universo. Muere un 7 de diciembre de 2018, con sus velas prendidas, esto hace ya casi 6 años, y no se ha visto ese dichoso libro.
Lo cierto que ese fue el fin de la guerrilla M19, que 37 años después gana las elecciones para gobernar a Colombia y crear zozobra e incertidumbre, además de inseguridad y mala calidad de la educación, adicionando el irrespeto a la sociedad. Que desgracia e ignorancia.
*Contador Público. Asesor Empresarial.
