Sicariato en Bucaramanga tendría conexión con redes del narcotráfico
Resumen
Un asesinato en Bucaramanga vinculado a la base de coca descubierta en maletas de un vehículo, apunta a una red criminal con conexiones en múltiples ciudades, implicando bandas del narcotráfico. Las autoridades investigan el incidente y la posible implicación de un líder criminal.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Hombres abandonaron la escena con base de coca en maletas
Un hombre venezolano, con prisión domiciliaria en Bello, Antioquia, asesinado en Bucaramanga y la huida de dos hombres que iban en el automóvil atacado, con maletas con base de coca, pintan in peligroso entramado criminal con apéndices en varias ciudades.
En un hecho que sacudió la tranquilidad de la capital santandereana, se ha registrado el asesinato de Denilson Alberto Herrera Brito, ciudadano venezolano de 27 años y conocido en Medellín por antecedentes en delitos de hurto y uso de armas de fuego.
El suceso ocurrió en la intersección de la Avenida La Rosita con Carrera 24, en una zona que combina áreas residenciales y comerciales, lo que ha incrementado la preocupación de la ciudadanía y de las autoridades.
El fallecido se encontraba bajo una medida de prisión domiciliaria impuesta en Bello, Antioquia, situación que reveló deficiencias en el control de personas en proceso penal.
Pese a la restricción, Herrera Brito se desplazó a Bucaramanga, donde rentó un apartamento para compartir con otros individuos, situación que contravino todos los protocolos de seguridad establecidos para sujetos con condena privativa de la libertad.
Las maletas misteriosas
El crimen se ejecutó en plena vía pública cuando dos sicarios que se desplazaban en motocicleta se alinearon con el vehículo y el parrillero la emprendió a tiros contra los ocupantes, balacera en la cual Denilson Alberto Herrera Brito llevó la peor parte.
El automóvil, un Ford Fiesta con placas ICW 919 de Cali, se convirtió en el escenario del ataque mortal. La operación se desarrolló de forma rápida y precisa. El agresor en su certero ataque dirigió disparos que alcanzaron fatalmente al conductor.
En el interior del vehículo se encontraba también una mujer identificada como Yorgelis del Valle, también de nacionalidad venezolana, quien recibió dos impactos en las manos.
La víctima herida fue trasladada a la clínica Chicamocha, donde los profesionales médicos realizaron una intervención de emergencia y, según los médicos, su situación no es crítica.
Es aquí en donde empieza a cambiar la trama de todo este incidente fatídico. Dos hombres más que ocupaban el vehículo atacado a tiros, esperaron la huida de los sicarios para descender del carro negro, abrir el baúl y sacar maletas con base de coca, según las autoridades.
Demasiados interrogantes en carpeta
Durante el desarrollo de la cinematográfica acción, quedó evidenciado que los atacantes iban por la vida de Denilson Alberto Herrera Brito, porque no se detuvieron a apoderarse del contenido del maletero.
La Policía Metropolitana de Bucaramanga inició de inmediato una investigación para esclarecer los detalles del suceso y determinar la participación de los involucrados.
El Coronel Misael Quiroga Morales, Comandante Operativo y de Seguridad Ciudadana en funciones, confirmó que el hoy occiso poseía antecedentes penales relacionados con hechos ocurridos en Medellín.
El funcionario enfatizó la relevancia de la detención domiciliaria otorgada por un Juez y a cargo del Inpec y evidenció la falta de controles efectivos cuando se permite el desplazamiento libre del sujeto entre ciudades.
Quedan muchos interrogantes en la carpeta de investigación que ha reunido pruebas que apuntan a la existencia de conexiones con redes de narcotráfico a nivel nacional.
De acuerdo con los datos preliminares, el vehículo Ford Fiesta transportaba en su baúl un cargamento de base de cocaína, producto que iba destinado a alias “Carnal”, presunto líder de la organización criminal conocida como “Los del Sur”.
Este detalle cobra gran relevancia al sugerir que el atentado no fue fruto del azar, sino el resultado de un ajuste de cuentas ligado al mundo del narcotráfico y que el vehículo era seguido desde su arribo a la ciudad.
Banda con tentáculos en todo el país
Los investigadores descartan cualquier versión que minimice la complejidad del caso y se centran en la hipótesis de que se trató de una operación coordinada por individuos con vínculos en múltiples ciudades.
Entre los elementos de prueba destacados se encuentra la revisión de imágenes de cámaras de seguridad instaladas en las inmediaciones del hecho. En estas grabaciones se pudo observar la presencia de una motocicleta AKT NKD de color negro, la cual fue empleada para la ejecución de la emboscada.
El análisis de estos registros se enmarca dentro de una labor investigativa de la Policía de Bucaramanga, coordinada con la Policía de Medellín y otras dependencias, en un esfuerzo conjunto orientado a desmantelar estructuras criminales que operan en distintas regiones.
El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, ha afirmado que la administración municipal no tolerará el incremento de la violencia y que se aplicarán medidas contundentes contra los responsables.
Asimismo, las investigaciones adelantadas buscan recabar testimonios de comerciantes y residentes de la zona, quienes han manifestado su inquietud por el aumento de los episodios delictivos en la ciudad.
El hecho de que el occiso se desplazara de Medellín a Bucaramanga en un vehículo matriculado en Cali, refuerza la idea de que hay conexiones peligrosas entre bandas de diversas ciudades, lo que exige una respuesta coordinada de las autoridades.
