Resumen
Taiwán acusó a China de retener a un alto ejecutivo de Formosa Plastics en Shanghái, impidiéndole salir del país. Este incidente ocurre en un contexto de creciente tensión entre Taiwán y China, y refleja la presión que Beijing ejerce sobre la isla, considerada por China como una "provincia rebelde".
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Taiwán acusó a China de retener a un alto ejecutivo del conglomerado Formosa Plastics, quien fue detenido en el aeropuerto de Shanghái. Según el Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, el empresario, cuya identidad no se ha revelado, llegó a Shanghái el 1 de septiembre y, aunque fue liberado tras una inspección, se le impuso un “control fronterizo” que le prohíbe salir del país.
El consejo taiwanés ha expresado su preocupación y ofrecido apoyo a la familia del ejecutivo, aunque no ha compartido detalles específicos para proteger su seguridad. Este incidente se produce en un contexto de creciente tensión entre Taiwán y China, especialmente desde la asunción del nuevo presidente taiwanés, William Lai, quien ha adoptado una postura favorable a la independencia de la isla.
El ejecutivo trabaja para Formosa Plastics, una de las empresas más grandes de Taiwán y un importante jugador en la industria petroquímica global. La situación se agrava considerando las relaciones comerciales ya tensas entre ambos territorios, con el gobierno taiwanés advirtiendo a sus ciudadanos sobre los riesgos de viajar a China.
La retención del empresario refleja una tendencia alarmante, ya que el portavoz del consejo señaló que muchos ciudadanos taiwaneses han sido detenidos o interrogados en China en los últimos años. La situación resalta la continua presión del régimen chino sobre Taiwán, que Beijing considera una "provincia rebelde".
