Resumen
La Administración de Bucaramanga ha provocado un caos de tráfico al cerrar una vía principal para organizar conciertos por el cumpleaños 401 de la ciudad. El tráfico, el ruido y la contaminación están afectando a comerciantes, residentes y peatones.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Capricho de la administración le sale caro a la ciudad
La monumental pifia de la Administración de Bucaramanga al convertir en pista de baile una de las vías principales y prioritarias para el transito automotor y de peatones en la ciudad, le sale caro a la ciudadanía.
Una andanada de reclamos se ha cernido sobre las Alcaldía de Bucaramanga, Santander, por la decisión desatinada de cerrar la carrera 27 en una de las intersecciones vitales para el desfogue del tráfico automotor, porque se han generado trancones interminables en todas las vías periféricas a ese sector.
El caos se ha extendido por toda la ciudad y las vías aledañas son incapaces de soportar el tránsito de todo tipo de vehículos y el desorden que se ha generado afecta a negocios, peatones y residentes, victimas colaterales de la pésima decisión tomada por la Alcaldía municipal.
La carrera 27 se convirtió en un improvisado escenario de conciertos para festejar el cumpleaños 401 de la ciudad, pero no midieron las consecuencias de las afectaciones que se generarían al no existir vías alternas con la capacidad de soportar el volumen de circulación vehicular y las horas pico se alargan de forma incontrolable.
Todo quedará igual
Comerciantes y habitantes de las calles 30 a la 21 y de las carreras 33 a la 38, se han visto perjudicados por el inusitado pulular de vehículos, el ruido que se genera desde tempranas horas del día hasta altas horas de la noche y, por consiguiente, los altos índices de contaminación nunca antes vistos en estos sectores de la ciudad.
“Para el alcalde y sus asesores esto lo toman como una ‘recocha’ ya que una vez que se acabe su fiesta todo quedará igual y no habrá juicio de responsabilidades, mientras los perjudicados somos nosotros, justo en estas fechas donde pensábamos resarcirnos el mal momento económico que vivimos”, expresó unió de los comerciantes del sector afectado por la colocación de la tarima para el concierto.
Así mismo, reclaman que no hay presencia de alféreces de tránsito para que impongan orden a ese caos, en el caso de los motociclistas que a altas velocidades se montan en los andenes y ponen en peligro la integridad física de peatones de todas las edades.
