Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Expulsión con trabas por parte de Migración Colombia y el Gobierno nacional
Convocatoria a unidad entre las autoridades locales y nacionales para abordar el problema de migrantes delincuentes de una forma efectiva y petición de mayor colaboración de Migración Colombia para expulsarlos a través de fronteras más distantes, para impedir su rápido retorno.
El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, elevó este jueves su voz en una contundente rueda de prensa, en la que instó a un frente unido contra la migración delincuente que afecta a la ciudad.
En un claro mensaje al gobernador de La Guajira, Jairo Aguilar Deluque, Beltrán enfatizó que "nuestra batalla no es entre territorios". El verdadero enemigo, según el alcalde, son aquellos migrantes que han llegado a Bucaramanga con la intención de delinquir.
"No es momento de fuego cruzado", sentenció Beltrán, e hizo un llamado a la colaboración entre las autoridades locales, regionales y nacionales para enfrentar este problema de manera conjunta.
El alcalde reveló la alarmante cifra de más de 600 migrantes con entre 5 y 7 anotaciones criminales, los cuales deambulan por las calles de Bucaramanga. "Comportamientos como la falta de respeto a la autoridad, porte ilegal de armas, riñas y violencia", son inaceptables, y Beltrán asegura que no los tolerarán más.
Trabas burocráticas
La solución propuesta por el alcalde es clara, expulsar a estos delincuentes. Sin embargo, se enfrenta a un obstáculo burocrático porque Migración Colombia solo permite la expulsión de cinco personas por mes, un ritmo que Beltrán califica como "inútil" para resolver la crisis.
"Tenemos que trabajar de manera articulada", recalcó el alcalde, exigiéndoles al Gobierno nacional que agilice los procesos de expulsión y permita que se realice a través de fronteras más distantes para evitar el reingreso inmediato de los delincuentes.
Beltrán también aprovechó la oportunidad para desmentir las acusaciones de xenofobia en su contra. "El problema no es con el alcalde ni con el Gobernador, es con los migrantes delincuentes", afirmó. "Todos los alcaldes sufrimos esto, solo que ninguno se ha atrevido a hablarlo".
Denunciar la problemática no es xenofobia
El alcalde de Bucaramanga, Jaime Beltrán, hizo un llamado a la unidad entre las autoridades locales y regionales, y a romper el silencio sobre este problema. "Tenemos que unirnos y buscar resultados oportunos", dijo. "El gobierno nacional nos dio la espalda, pero no podemos quedarnos callados".
El mandatario citó datos que indican que el 15% de las personas capturadas por delitos en Bucaramanga son migrantes venezolanos. "La ley 108 nos permite expulsar a quienes no respetan las leyes", aseguró, y advirtió que tiene "un rimero de papeles" con las anotaciones policiales de esos delincuentes y “hay uno que tiene 17 anotaciones, eso es impresentable y no lo podemos tener en la ciudad”.
"No me llamen xenófobo cuando lo que hablo es de la defensa del territorio y de la defensa del bumangués", declaró Beltrán con firmeza. "Estoy en el hecho de defender el territorio y se los aseguro, la gran mayoría de Gobernadores y Alcaldes vivimos la misma realidad".
El mensaje del alcalde de Bucaramanga es claro: la migración delincuente no será tolerada. Se requiere una acción urgente y contundente por parte de las autoridades locales, regionales y nacionales para garantizar la seguridad de los ciudadanos y defender el territorio.
