Resumen
Luego de recibir rechiflas y abucheos en una ceremonia de ascensos de patrulleros de la Policía., tuvo que enfrentarse a centenares de familias del personal uniformado
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Siguen los malos momentos del presidente Gustavo Petro, acostumbrado a llegar tarde a todas las ceremonias oficiales. Luego de recibir rechiflas y abucheos en una ceremonia de ascensos de patrulleros de la Policía., tuvo que enfrentarse a centenares de familias del personal uniformado. Los asistentes se mostraron visiblemente molestos con el jefe de Estado por la impuntualidad. Alegaron que el evento estaba programado para las 2:00 de la tarde y llegó cuando habían pasado varias horas. La ceremonia debía realizarse en la Escuela de Policía Gonzalo Jiménez de Quesada en Sibaté (Cundinamarca).
Sin embargo, una vez se presentó el mandatario colombiano, presentó excusas por no llegar a tiempo a la ceremonia, señalando que obedeció a reuniones de alto nivel. “Amigos de la prensa, y en donde en cierta forma me jugaré buena parte de la existencia del Gobierno, nos concitaron esta mañana a reuniones urgentes y por eso llegamos algo retardados; no es excusa, ya verán ustedes lo que eso significaba”, sostuvo Petro.
De la misma manera y, al parecer, congraciándose con los patrulleros por su impuntualidad, ordenó ocho días de vacaciones para 13.000 patrulleros que fueron ascendidos. “Ocho días de descanso va a tener todo el personal que ha sido ascendido en el día de hoy para que disfruten con sus familias, con sus personas queridas, un día que es indudablemente muy feliz en la existencia humana, dependiendo de la vocación que cada uno de nosotros tenemos en la existencia humana, aquí se ascendieron 12 mil, 13.373 funcionarios en todo el país”, dijo el mandatario colombiano.
