Resumen
Un esquema de estafa de más de 1.700 millones de pesos fue desmantelado en Santander con la captura de tres integrantes. La red criminal utilizaba anuncios en redes sociales para vender falsamente vehículos de subastas judiciales. Las víctimas transferían dinero, pero nunca recibían los vehículos.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
Un sofisticado esquema de estafa que dejó pérdidas superiores a 1.700 millones de pesos fue desmantelado en Santander, tras la captura de tres de sus principales integrantes. La red criminal engañaba a sus víctimas mediante atractivos anuncios en redes sociales que promocionaban supuestas subastas judiciales y bancarias de vehículos a precios irresistibles.
Las autoridades identificaron a los detenidos como José Andrés Landazábal Dueñas, Nubia Victoria Pabón Chilito y Orlando García. Las capturas se llevaron a cabo en Bucaramanga y Floridablanca, gracias a un operativo conjunto entre la Policía Nacional y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI). Durante la acción se incautaron 24 tarjetas SIM, cinco celulares, un computador portátil y documentos falsificados, como títulos valores y certificaciones bancarias.
El fraude, que afectó a al menos 63 personas en ciudades como Bucaramanga, Medellín, Villavicencio, Cúcuta y Barranquilla, operaba mediante la publicación de catálogos falsos de vehículos en remate.
Las víctimas contactaban a los delincuentes y recibían contratos y registros de cámara de comercio fraudulentos que simulaban legalidad. Una vez convencidas, debían transferir hasta el 50% del valor del vehículo para asegurar su participación en la subasta y el saldo restante antes de la supuesta adjudicación. Sin embargo, el automóvil prometido nunca llegaba.
Una fiscal de la Seccional Norte de Santander imputó a los capturados los delitos de concierto para delinquir y estafa agravada en modalidad masa. Un juez de control de garantías ordenó su reclusión en un centro carcelario mientras continúan las investigaciones para identificar a más implicados y víctimas del esquema.
El modus operandi de esta red abarcó múltiples municipios de Santander, Norte de Santander y otras regiones del país, generando un impacto significativo en las comunidades. Las autoridades hacen un llamado a quienes hayan sido víctimas a denunciar para fortalecer las acciones judiciales en contra de esta organización.
