Señor Empresario

Por: José Caicedo Solano. Existe en España la Academia de Ciencias Morales y Económicas, que entrega un giro de la moral y la ética llevada a la riqueza o a la pobreza, según sea el campo que estés analizando. Extraigo del periódico de la Universidad Nacional, en su número 220 de septiembre del 2022, referencias de la entrevista que le hacen a la Dra. Adela Cortina, en la cual manifiesta el comportamiento humano con relación a las clases sociales.

Acuña el término de APOROFOBIA, que lo define como el odio y o rechazo a los pobres. Explica, que la pobreza es la falta de libertad, para poder llevar a adelante, los planes de la vida. Una población educada es más libre. Dice además que la xenofobia no la aplican a los extranjeros, por ser tales, sino por ser pobres. Recuerdo que no había xenofobia, hacia los colombianos que llegaban a Venezuela en los años de 1950, huyendo de la violencia, protagonizada por los “grandes líderes de barro” de los partidos liberal y conservador, que llenaron de odio a un pueblo inculto. La razón era, que Venezuela necesitaba de la mano de obra campesina, para desarrollar las grandes fincas, habidas en manos de extranjeros, terratenientes españoles, portugueses, italianos y uno que otro “majito”.

Pero, si hay en Colombia, xenofobia, hacia los venezolanos, por la consecuencia, de la competencia en el empleo, ya sea de mano de obra calificada, no calificada, de trabajo sexual y hasta de profesionales universitarios, cosa que se está viendo desde los años del 2014 y siguientes y que hoy, septiembre del 2023, ya toma dimensiones que repercuten la esfera terrestre y su problema ha llegada a los órdenes de la OEA y la ONU.

El subsidio del gobierno a los venezolanos, que huyen, no solo de un régimen dictatorial, sino de una física hambre, no son sino los primeros auxilios, que igualmente los entregó Venezuela en los años a que hago referencia, cuando se extendían cambuches o campamentos, a las orillas de las carreteras intermunicipales, porque, cerca a la vera, había plátano, yuca y ríos que provisionaban el agua y el pescado.

Entonces, señor empresario, con una política concertada entre un gobierno honesto y un empresario consciente, se pueden programar grandes o medianos proyectos que pueden servir hasta para exportar. La dinámica de la economía está en el ingreso racional a la familia. Miremos que podemos dar más que lo que estamos haciendo. Un llamado a la clase política, congreso y gobierno, para que no asuman el comportamiento “aporofóbico”, y brinden los dineros necesarios para las universidades. No les de miedo de ver un pueblo pobre que pueda recibir educación universitaria.

OJO. No he escrito ninguna columna referente al señor Jaime Calderón. Soy, JOSE CAICEDO SOLANO. Profesor 15 años del Sena y 35 años profesor universitario, candidato al concejo de Bucaramanga, por el Centro Democrático número 8. Alcalde Diego Tamayo.

*Contador Público. Asesor Empresarial. Correo: jcaicedosolano@gmail.com