Resumen
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)El Ministerio de Agricultura se comprometió además a actualizar los precios de los subsidios.
Se trata de familias campesinas vulnerables y víctimas del conflicto armado, quienes mediante las resoluciones 256 y 262 de 2019 recibieron un subsidio de vivienda después de participar en una convocatoria realizada por el Ministerio, y cuya ejecución debió realizarse en 2020, pero no se materializó porque un contratista irresponsable no ejecutó la obra, se apropió del anticipo entregado y dejó a los beneficiarios esperando.
Por Camilo Ernesto Silvera Rueda - Redacción Política / EL FRENTE
El caso llegó hasta los tribunales debido a que varios de los beneficiarios iniciales entablaron una acción de tutela que fue fallada en primera y segunda instancia en favor de las comunidades, laudos que ordenaron que en un plazo no mayor a dos meses el gobierno nacional debía lograr la consecución de los recursos y ejecutar los subsidios.
En su reciente pronunciamiento, el Tribunal Administrativo de Santander ordenó al Ministerio de Agricultura y Fiduagraria amparar los derechos a la vida y vivienda digna de una familia del municipio de Galán, fallo que replica en igualdad de condiciones para los demás beneficiarios, a quienes inicialmente se les habían asignado una cuantía de 12 mil millones de pesos para la construcción de la vivienda rural.
Ahora, dichas familias tienen la esperanza de ver su techo después de años en los que Fiduagraria tuvo que reclamar el dinero a las aseguradoras del contrato y buscar nuevo ejecutor.
Debido a las demoras presentadas en el proyecto, desde la veeduría se logró la creación una mesa de seguimiento especial encabezada por la Dirección de Bienes Públicos Rurales del Ministerio de Agricultura, en la que participan además el Ministerio de Igualdad y Equidad, Secretaría de Vivienda de Santander, Alcaldías de los municipios beneficiados, Enlace de Víctimas y representantes de los beneficiarios, desde la que se hará monitoreo a la ejecución al proyecto.
Revive el sueño
Después de todo este litigio, seis años después de una promesa de vivienda, las 198 familias de Santander empiezan a ver materializado su sueño, ya que en los últimos días se inició la ejecución de los subsidios de vivienda y mejoramiento que se asignaron por parte del Ministerio de Agricultura en 2018 a familias de los municipios de Simacota, Sabana de Torres, Rionegro, San Gil, Barichara, Curití, Charalá, Galán y Vélez.
Esta semana el programa, operado por Fiduagraria, ya muestra las primeras imágenes de obra de las viviendas nuevas. De acuerdo con Cristian Eduardo Beltrán Velásquez, líder cívico, periodista y veedor de este proyecto, además de la ejecución de las obras “el Ministerio de Agricultura se comprometió a realizar la indexación al valor de los subsidios, que, aunque su precio aparece de 41 millones de pesos, se incrementará a alrededor de 90 millones, lo cual mejora las condiciones estéticas y brinda a estas familias una vivienda digna”.
Beltrán Velásquez añadió que “la mayoría de los subsidios corresponde a familias víctimas del conflicto armado, por lo que la ejecución de este proyecto es además parte de la reparación integral por haber padecido los horrores de la guerra en nuestro país”.
Nelly Tatiana Pardo Reyes, una de las beneficiarias del municipio de Vélez aseguró que “ver materializado este beneficio nos brinda tranquilidad y bienestar como familia, también significa una estabilidad financiera. Este es un logro que aspiraba tener en mi vida”.
Por su parte Francelina Guerrero, una de las beneficiarias de Galán aseguró que “es muy satisfactorio para nosotros como familia Benavides Guerrero haber logrado que por fin se nos haga realidad nuestra vivienda nueva después de seis años de ardua lucha y trabajo se esté haciendo realidad este proyecto que beneficia a varias familias de Galán, Santander”.
La beneficiaria además agradeció al veedor por el acompañamiento que le ha dado al proyecto durante estos años.
De acuerdo con la información del veedor Beltrán Velásquez, se espera que entre julio y agosto se termine de ejecutar la totalidad de los subsidios, teniendo en cuenta que los inicios de obra han sido paulatinos.