El misterio persiste en los montículos de Mima en Washington

La Reserva Natural de Mima Mounds en Washington es el escenario de un enigma geológico que ha desconcertado a los científicos por más de cien años. Pese a las diversas teorías que han surgido, la formación de los distintivos montículos de esta área continúa siendo un misterio.

En la reserva, se pueden apreciar montículos de uno a dos metros de alto y hasta doce metros de ancho. A pesar de que estas formaciones también han sido observadas en otras regiones del mundo, como Sudáfrica, sus orígenes siguen sin resolverse.

Regina Johnson, ecóloga adjunta del Departamento de Recursos Naturales de Washington, señaló que existen *'más de 30 teorías'* sobre el origen de estos montículos, que van desde la actividad sísmica hasta la presencia de pequeños roedores cavadores.

Un estudio de 2013 publicado en Science señaló a los geómidos como posibles arquitectos de los montículos. A pesar de sus afirmaciones de haber resuelto el misterio, la comunidad científica continúa debatiendo el tema con tenacidad.

Entre las propuestas destacan la hipótesis eólica, que postula que la vegetación captaba sedimentos transportados por el viento, y la teoría que sugiere que las corrientes de deshielo glaciar tallaron el terreno alrededor de los árboles, creando depresiones. En 1990, Andrew Berg llevó a cabo un experimento que sugería que las ondas sísmicas podían estar detrás de la formación de los montículos.

Las tradiciones orales de los nativos del Alto Chehalis hablan de inundaciones que dejaron olas de tierra permanentes, lo que coincide parcialmente con la teoría de una inundación glaciar que arrastró sedimentos hace 17,000 años.

La reserva natural es un Monumento Nacional, con 257 hectáreas que albergan diversas especies de aves y ofrecen espectáculos florales en primavera. Este lugar no solo atrae a científicos, sino también a turistas y locales que especulan sobre su origen.

A pesar de los diversos planteamientos, no hay un consenso general sobre la causa de estas formaciones. La singularidad de los montículos revela la *'impresionante simetría que rara vez se ve en la naturaleza'*, según Coe, editor gráfico del Servicio Geológico de Washington. Johnson reflexiona en torno a la complejidad de este fenómeno natural: *'No sé si alguna vez lo sabremos con certeza'*.