Resumen
El presidente ruso, Vladimir Putin, visitó Abu Dabi y Riad en una gira histórica que reforzó las relaciones entre Rusia y Oriente Próximo con simbolismos y reuniones de alto nivel. Putin destacó la creciente cooperación en áreas como la industria, energía, y asuntos humanitarios.
Generado por Inteliegenica Artifical (OpenAI)
El presidente ruso, Vladímir Putin, llevó a cabo una histórica visita a Oriente Próximo este miércoles, marcando su presencia en la capital de Emiratos Árabes Unidos, Abu Dabi, y en la capital de Arabia Saudita, Riad. La gira, calificada como un "potente disparo" para el desarrollo de las relaciones entre Rusia y la región, se destacó por gestos simbólicos y encuentros de alto nivel.
Durante su llegada a Abu Dabi, Putin fue escoltado por cazas Su-35S que obtuvieron permisos especiales para acompañar su avión a lo largo de la ruta. La bienvenida oficial incluyó una ceremonia en la que aviones de la Fuerza Aérea de Emiratos Árabes Unidos colorearon el cielo con los tonos de la bandera rusa, mientras la Compañía de la Guardia de Honor de las Fuerzas Armadas de EAU participaba en el evento.
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En las calles de la capital de los EAU, la delegación rusa fue recibida con una exhibición visual imponente. A lo largo del recorrido, caballos y camellos con jinetes se alinearon, ondeando banderas rusas y emiratíes. Salvas de cañón resonaron en honor al presidente ruso, y frente al palacio presidencial, Qasr Al Watan, se interpretó el himno ruso.
En las conversaciones con el presidente de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed Al Nahayan, Putin destacó el nivel sin precedentes alcanzado en las relaciones bilaterales, señalando avances en la cooperación industrial, proyectos clave en el sector de petróleo y gas, así como la colaboración en la OPEP+ y los lazos humanitarios.
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Posteriormente, Putin se dirigió a Riad, donde mantuvo conversaciones con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán. El líder ruso expresó la firmeza en el desarrollo de las relaciones amistosas entre ambos países y la necesidad de abordar cuestiones regionales, incluyendo la situación en Oriente Medio, la energía y el conflicto en Ucrania.
La gira de Putin por Oriente Próximo cobra mayor relevancia en el contexto de la visita prevista del presidente iraní, Ebrahim Raisi, a Moscú el 7 de diciembre. Según el asistente presidencial ruso, Yuri Ushakov, estos encuentros son un "potente disparo" para el desarrollo de las relaciones en la región y envían una clara señal a la comunidad internacional.
