Reacción adversa de senadores de EE.UU. ante discurso de presidente colombiano Gustavo Petro

Reacción adversa de senadores de EE.UU. ante discurso de presidente colombiano Gustavo Petro

Políticos estadounidenses califican a Gustavo Petro de simpatizante terrorista y alertan sobre las repercusiones de su gestion

En medio de las tradicionales celebraciones del Día del Trabajo en Bogotá, donde miles se unieron para reivindicar derechos laborales, el presidente Gustavo Petro fue objeto de críticas por su llamado a respaldar las reformas gubernamentales, percibido por algunos como una distracción del propósito original de la fecha.

Controversia mayor se desató cuando Petro anunció desde la plaza de Bolívar que "se romperán las relaciones diplomáticas con Israel" y describió al país y su gobierno como "genocidas."

Senadores estadounidenses respondieron con preocupación y desaprobación. Marco Rubio se adelantó con una crítica, describiendo a Petro como un "simpatizante terrorista que quiere ser una versión colombiana de Hugo Chávez." María Elvira Salazar acusó a Petro de alinearse con regímenes autocráticos y desviar la atención del manejo de su gobierno, calificando su actitud de alimentar el antisemitismo.

Carlos Giménez se sumó a las críticas enfatizando la sintonía de Petro con el presidente venezolano Nicolás Maduro y distanciándose de los valores estadounidenses. Señaló que "Israel es la única democracia en el Medio Oriente y el aliado más fuerte de EE.UU. en la región."

Mario Díaz Balart no se quedó atrás y arremetió contra el presidente colombiano, recordando su pasado guerrillero y denunciando la ironía de sus comentarios respecto a Israel siendo él exmiembro del M-19.