Movimientos ambientales de Santander piden al gobierno mantener mesa de diálogo con el ELN

Con más de 150 asistentes finalizó en Bucaramanga el primer Encuentro Nacional Ambiental, realizado en la Universidad Industrial de Santander, y en el cual los miembros de la sociedad civil tuvieron su primer cara a cara con delegados del gobierno nacional y de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, con el objetivo de construir una agenda común para que el medio ambiente y los líderes ambientales logren un posicionamiento de privilegio en los diálogos de paz.

Durante el encuentro, una vez realizadas las contextualizaciones y presentación de avances del proceso de negociación entre el gobierno nacional y el Ejército de Liberación Nacional – ELN, los asistentes desarrollaron conversatorios en comisiones y plenarias que dieron cuenta de los diagnósticos y alternativas, riesgos, oportunidades, condiciones y garantías; así como las recomendaciones al plan nacional de transformaciones ambientales.

El objetivo de esa participación de la sociedad civil en Bucaramanga fue iniciar la búsqueda de espacios para constituirse, desde los movimientos ciudadanos que trabajan en torno al mejoramiento del medio ambiente, en elementos medulares del grupo núcleo de la alianza social y política, que permita avanzar desde los territorios en el logro de un acuerdo nacional paz.

El medio ambiente como

víctima del conflicto

“Consideramos que la paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento y que la soberanía reside en el pueblo, por eso hacemos un llamado a las partes en la mesa de negociación a hacer todos los esfuerzos por mantener la mesa de negociaciones, el cese al fuego bilateral, el impulso permanente de las dinámicas de participación de la sociedad y concretar los acuerdos de paz con transformaciones.”, expresó un vocero de la mesa nacional ambiental que se instaló la semana pasada en Bucaramanga, quien convocó a la sociedad colombiana a apropiarse de su espacio en las dinámicas de participación y la construcción de una cultura de paz, en el marco de los actuales diálogos de pez con el Eln

“El llamado es para que todos estemos en capacidad de reconocer al territorio y a la naturaleza como víctimas del conflicto y del modelo de desarrollo, que permita una ley de reparación y una comisión de la verdad que consolide la restauración y reparación ambiental del país. Por eso instamos al Estado Colombiano a garantizar la integridad y la vida de todos los actores, promotores y ciudadanos que impulsan y promueven la participación para la paz de Colombia, honrar los compromisos internacionales ambientales e implementar en todo vigor el acuerdo de Escazú”, indicó el portavoz de la Mesa Ambiental, quien además pidió al gobierno nacional darle paso a la creación de una Asamblea Ambiental Permanente Por la Paz “como espacio y proceso que promueva un gran dialogo nacional ambiental y agromineroenergético por la paz de Colombia”.

Agenda ambiental

Igualmente, desde la mesa hicieron un llamado al movimiento ambiental para construir una agenda de participación que involucre mecanismos y dinámicas de participación, para mantener el diálogo entre el movimiento ambiental, más allá de este espacio de negociación entre el Gobierno Nacional y el ELN: “Necesitamos realizar una cartografía social y mapeo de actores que recojan lo ya hecho por los Observatorios de Conflictos Ambientales, Centro Nacional de Memoria Histórica, Comisión de Esclarecimiento de la Verdad, ¡Basta Yá!, Que Haiga Paz y otros diagnósticos existentes”, puntualizó el vocero de la mensa ambiental, quien aseguró el compromiso firmado por los líderes ambientales de Santander que asistieron a la actividad fue comprometerse para convertirse en promotores de la paz, desde las regiones.