El victimario del que hablamos era nada más y nada menos un reconocido instructor deportivo en Santander, y uno de sus últimos roles lo desempeñó como entrenador de primera fila en la Liga de Atletismo de Santander. ¿Sus víctimas? Adivinen. La mayoría menores de edad quienes tenían no solo talento sino grandes aspiraciones en el deporte. Pese a que se atrevieron a denunciar hace varios años, hoy hay completa impunidad.

Por Camilo Ernesto Silvera Rueda - Redacción Política / EL FRENTE.

Hoy los sueños de muchas de quienes eran apenas unas niñas en edad de formación deportiva están completamente mancillados por los vejámenes que tuvieron que padecer como pupilas de un sujeto que se aprovechó de su rol de autoridad para llevar a un estado de sumisión mental a sus víctimas, con esta estrategia logró abusarlas sexualmente.

Hablamos del señor Giovanny Vega Blanco y las penurias a sus víctimas se cuentan por años a lo largo de su desempeño como formador deportivo. Sus víctimas, igual de innumerables; algunas de ellas ni siquiera se han atrevido a denunciar. Pero quienes sí lo hicieron temen que la justicia nuevamente las revictimice, pues pese a que este hombre se encuentra imputado por el delito de acceso carnal violento agravado, y con una medida de aseguramiento en su domicilio, continúa llevando una vida de privilegios  

Recientemente, a Giovanny Vega Blanco lo vieron paseando en su bicicleta por varias vías públicas de la capital santandereana y Martha Jazmín Guerrero, víctima de este hombre y en representación de otras jóvenes abusadas, le efectuó un llamado a la Fiscalía General de la Nación y a los jueces del Distrito Judicial de Bucaramanga que han intervenido en el caso a que actúen conforme a la ley para evitar que ocurran más agresiones.

“Lastimosamente estamos viendo esta situación. Este señor continúa por las calles haciendo deporte y compartiendo con la gente. No me parece justo. Desafortunadamente ante las instancias judiciales no nos han dado respuesta de porque el proceso no avanza, y cuando avanza se mueve mínimamente”, reclamó Guerrero.  

Todo esto ocurre pese a que desde hace varios meses se anunció la creación de manera conjunta, con la Fiscalía, la Procuraduría, el Ministerio del Deporte, el ICBF, la Alcaldía de Bucaramanga, entre otras instancias, de un equipo de trabajo para lograr que se esclarezcan rápidamente las situaciones denunciadas.

“No podemos tolerar que se presenten casos de abuso sexual en contra de ninguna mujer, joven, adolescente o niña, y mucho menos podemos permitir que eso ocurra en el escenario de las actividades de formación deportiva”, aseguró Carlos Camargo, quien para la fecha de la creación de la mesa institucional, en enero de 2022, ejercía como Defensor del Pueblo, donde se había recibido información preliminar en la que se pone en conocimiento que Giovanny Vega Blanco y Betty Rojas Sanguino podrían haber cometido maltrato infantil, acoso sexual, violencia en contra de la mujer, explotación de menores de edad, explotación laboral y económica, violencia física o moral, abuso de tipo sexual, tratos crueles, inhumanos y degradantes contra deportistas que entrenaban en el Club Deportivo Marlon Sports. Pese a los rimbombantes anuncios, hoy no ha pasado nada.